El liderazgo Ágil es fundamental para dar soporte al proceso de cambio y de otros tipos dentro de una organización.
El líder ágil se puede ver desde varias perspectivas, pero su centro es la responsabilidad del crecimiento de las personas y el foco en la mejora de la entrega de valor y los resultados de negocio. Ser un soporte cultural del trabajo en equipo y la autogestión es vital para que se produzca la Transformación ágil en una organización.
El líder mejora la transparencia al proveer el espacio para definir objetivos valiosos, incorporando los puntos de vista de manera colaborativa. Desde la mentalidad de producto, impulsa el cambio cultural hacia el cliente como el centro de la entrega de valor.
Muchas organizaciones quieren adoptar la Agilidad y Scrum, pero sin promover un cambio cultural o de mentalidad; en este escenario, la adopción se vuelve un ejercicio mecánico que no sostiene la entrega de valor porque no se basa en la autogestión y el crecimiento de las personas para entregar resultados valiosos a los clientes.
Parte de las responsabilidades del líder están asociadas al crecimiento de las personas y equipos; a través de la delegación y el soporte con coaching, mentoría, enseñanza, facilitación, puede mejorar la autogestión de manera gradual y saludable.
Un aspecto a considerar es el cambio de métricas tradicionales como velocidad en puntos de historia, cumplimiento de hitos hacia métricas de valor, resultados de negocio y de capacidades que usan para mejorar la adaptación y el trabajo en equipo.